Buenas. Soy arrendatario de una vivienda a la que accedí con una serie de electrodomésticos ( frigorífico y lavadora) de bastante antigüedad (entre 15 y 18 años).
En el momento en que entré los electrodomésticos referidos no presentaban problemas, pero pasado alrededor de seis meses la goma o imán de la puerta del frigorífico comenzaba por su zona superior a no pegarse con el cierre, provocando que el frío se saliese, peligro de deterioro del electrodoméstico y que hubiese un gasto mayor de consumo. Tras consultarlo con un técnico  de la marca por teléfono, proporcionando toda la información de la incidencia y del modelo, éste me informa de que la solución sería la sustitución de la goma, pero que no merecía la peña asumir el coste debido a que se hallaba descatalogada y que una adaptada costaría bastante más que un frigorífico en sí. Comenté la incidencia a la casera, la cual apareció en el inmueble con su padre y pegaron con silicona la goma, pese a la información antes referida. Como dicha solución no produjo un cambio a mejor, pedí a la dueña la sustitución del frigorífico dándome largas y manifestando que no disponía de dinero en aquel momento. 
Tras muchos meses y harto de la situación referida, volví a contactar con la dueña del piso ,le pedí la sustitución y que no me importaba llamar a un técnico para que realizase la revisión y constatase la información aportada (craso error por mí parte porque tenía que haberlo hecho de primeras), a lo que ella en un principio no me contestó. Al día siguiente me llamó diciendo que había comprado el frigorífico y cuando llegó, éste era de menor tamaño, pasé de tener uno de 175cm a uno de 144 cm, lo que me llevó a tener que conseguir gracias a un amigo, una pequeña nevera que me ayudase a guardar todos los alimentos.
¿Es exigible al propietario que cuando se proceda a la sustitución de un electrodoméstico, éste sea de las mismas dimensiones? En caso afirmativo, y ante la negativa de la dueña a hablar del tema, ¿Que soluciones tengo para ello?
Gracias de antemano